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SEPTIEMBRE

Turdus infuscatus

Primavera Negra

 

La Primavera Negra es miembro de un grupo de aves que se distribuyen mundialmente, y que generalmente son conocidos con los nombres comunes de zorzales, mirlos, calandrias o petirrojos, y que técnicamente se ubican dentro de la familia Turdidae. En esta familia se incluyen a una gran variedad de géneros. En México contamos con alrededor de 8 especies de primaveras, que son incluidas solamente en el género Turdus. En la región central del estado de Veracruz, estos miembros del género Turdus son llamados popularmente primaveras, dado que comienzan a cantar principalmente durante la estación primavera-verano. Un caso muy especial dentro de las primaveras es la poco conocida Primavera Negra, cuyo nombre científico es Turdus infuscatus.


Esta singular primavera, donde el plumaje de los machos es negro brillante, con un intenso color amarillo en las patas, pico y anillo alrededor del ojo, habita en los bosques de pino encino llenos de humedad, como los bosques de niebla. A diferencia de otras primaveras, esta especie presenta dimorfismo sexual, lo cual quiere decir que hembras y machos tienen apariencias distintas. Solo los machos adultos son negros que da nombre a la especie (infuscatus, proviene del latín infuscare, que puede traducirse como “volver negro” u “oscurecer”), mientras que las hembras son tonos color marrón, también tienen las patas amarillas pero el pico es oscuro a diferencia del macho. 

La Primavera Negra es una de las menos conocidas en cuanto a su historia natural. Se distribuye desde el Este y Sur de México hasta Nicaragua, entre 1200 y 3500 m de altitud. En México se reproduce entre los meses de mayo y julio. El nido es una copa hecha de musgo verde, revestido con pequeñas raíces. El tamaño de la nidada es de 1-2 huevos de color azul claro. Es más fácil escucharlas que verlas posadas entre la densa vegetación de los bosques nublados. Los machos desde la parte alta de los árboles emiten sus trinados cantos con el fin de anunciarse a una gran audiencia, delimitar su territorio, pero sobre todo hacerse evidentes ante potenciales hembras. Su canto es uno de los más ricos, variados y hermosos que se pueden escuchar en los bosques templados y son parte importante de los coros del amanecer, este periodo en la temprana mañana donde muchas especies de aves participan en una sonora sesión vocal. El canto de la Primavera Negra es una serie de ricas y trinadas frases que se repiten de dos a tres veces en prolongadas sesiones vocales, que son un deleite para nuestros oídos. 

Por otra parte, sabemos que su dieta se basa principalmente de frutos y alguno que otro insecto. Debido al consumo de diversos tipos de frutos, seguramente es un buen dispersor de semillas, y de este modo contribuye a la regeneración de los bosques. Ocasionalmente, se alimenta en claros del suelo, pero es principalmente arbóreo.

Desafortunadamente, debido al color de su plumaje, pero sobre todo a su peculiar canto, la Primavera Negra es considerada como un ave de ornato y por lo tanto objeto de captura para su venta, muchas veces ilegal, al cual también contribuye a su actual situación de conservación.  De acuerdo con las leyes mexicanas esta primavera es consideran como En Peligro de Extinción, debido sobre todo a la modificación y fragmentación de su hábitat. En los alrededores de zonas urbanas como la ciudad de Xalapa, los registros de esta especie han ido disminuyendo con el paso de los años, quizás porque es cada vez más difícil que esta ave se adentre en una urbe que reduce sus espacios arbolados.

En general, el conocimiento biológico sobre la Primavera Negra es aún escaso. ¿Qué cosas podemos aprender todavía de este espléndido cantor de la neblina? 

 

 

Fernando González-García

Red Biología y Conservación de Vertebrados

Biblioteca de Sonidos de las Aves de México (BISAM)

 

Fotografías: Alberto Lobato